Cada fin de año me gusta hacer 2 o 3 propósitos de año nuevo, y siempre los hacía muy al aire solo ponía, viajar, bajar de peso, hacer más ejercicio, comprar x cosa nuevas, pero… a mitad de año ya no recordaba por qué o qué tan cerca estaba de cumplirlos.
Desde hace 3 años comencé a hacer mis propósitos de manera distinta, comencé a tomar en cuenta la parte financiera para poder lograrlos. Por ejemplo, si antes solo decía quiero viajar, ahora sé que necesito ahorrar y para ahorrar necesito conocer mis ingresos y egresos para establecer la suma que puedo ahorrar al mes.
También, tengo que aceptar que aun cuando hago mis propósitos con todas las ganas de cumplirlos, es normal que los olvide después de algunos meses. Algunas de las razones de que esto suceda es que al momento de definirlos en realidad eran metas inalcanzables, poco específicas y demasiadas. Por eso, ahora antes de redactarlos uso esta pequeña guía que me ayuda a que sean retadores pero no imposibles de lograr:
Este 2023 yo quiero poder viajar, pero tengo una limitante, estoy pagando mi casa, por ello hice el siguiente ejercicio:
Realista: ¿A dónde quiero viajar?
Me gustaría ir a Europa, pero la deuda de mi casa retiene gran parte de mis ingresos, por lo que considero que puedo irme una semana a una playa en México a un hotel todo incluido.
Objetivo claro: ¿Por qué quiero viajar?
Debido a la pandemia, así como a la construcción y ahora deuda de mi casa, no hemos podido viajar en los últimos 3 años mi pareja y yo. Por eso, este 2023 queremos salir de viaje y pasar un tiempo de calidad juntos; irnos a un hotel todo pagado para relajarnos, descansar y celebrar todo lo que hemos logrado
Haz un plan: ¿Cómo lo voy a lograr?
Me gustaría viajar en temporada baja, específicamente en octubre que es nuestro aniversario, esto me da 9 meses para ahorrar.
Siguientes pasos:
Mi propósito quedó de la siguiente manera: abrir un ahorro recurrente por $1,100 mensuales para viajar con mi pareja en octubre a un hotel todo incluido en Cancún.
Recuerda empezar con un solo propósito, convertirlo en una acción fácil de lograr y crear un plan. Pregúntate, ¿qué acción puedo hacer ahora mismo para empezar? Convierte esa acción en algo aún más sencillo y fácil de lograr. Puedes empezar hoy mismo y recuerda ser constante.