“Primero dejo de gastar por unos meses antes de hacer mi presupuesto”, “No tengo tiempo para registrar todos mis gastos”, “No tengo dinero, ¿cómo voy a hacer un presupuesto?”, “No necesito anotarlo, lo llevo todo en mi cabeza”
Estas son algunas barreras que nos impiden analizar nuestros gastos, definir metas realistas o inclusive ahorrar. Si te identificas con alguna de las frases anteriores, deja de estresarte por no ser aplicado/a y haz un plan que en verdad vaya de acuerdo a tus necesidades.
Estas son algunas opciones para iniciar con un plan financiero sin presupuesto:
Sigue la regla 80/20 en donde ahorras el 20% y gastas el 80% de tus ingresos. ¿Se te hace muy alto ahorrar el 20%? Empieza con un 5% y súbele según sean tus posibilidades. El beneficio de seguir esta regla es que no tienes que registrar a detalle cuánto gastas en comida, salidas, etc. Solamente cuando te depositen tu nómina o cuando recibas un pago, en automático separa un porcentaje.
De preferencia ten una cuenta separada para tu ahorro, con el objetivo de no ver ese dinero disponible para gastos. Si escoges esta opción, no olvides considerar tu deuda, no dejes que los intereses se te acumulen o que baje tu puntaje en el buró de crédito. Si tienes mucha deuda acumulada, antes de empezar un ahorro revisa primero cómo hacer un plan de pagos para irla disminuyendo.
Si no tienes deudas por pagar, entonces puedes invertir lo que ahorras, recuerda asegurarte de invertir tus ahorros en algo que te de un rendimiento igual o mayor a la inflación.
Tip: revisa la inflación y compárala con el rendimiento de la inversión que estás considerando contratar.
Revisa la suma de tus ingresos y gastos para hacer la resta “Ingreso total – Gasto total”. ¿No le quieres dedicar 5 horas a registrar lo que gastaste en pequeñas compras? No lo hagas, solo suma tus gastos totales de una semana, quincena o mes y asegúrate que no estés gastando más de lo que puedes pagar.
Tip: Es más fácil si lo haces a través del estado de cuenta de tu tarjeta bancaria porque se queda registrado en automático, si usas efectivo es más difícil.
Si el resultado es negativo, estás gastando más de lo que puedes y tu siguiente paso debe estar enfocado a recortar gastos.
¿Te quieres comprar algo? ¿Quieres formar un fondo de emergencias? ¿Empezar a invertir? ¿Formar un patrimonio para cuando te retires? Haz una lista donde pongas lo siguiente: Qué quieres, cuánto cuesta o cuánto dinero tienes que acumular para lograrlo y los meses que te tomaría lograrlo. Ahora divide el monto total por el número de meses. Igual que en la opción 1, sepáralo en otra cuenta e inviértelo para que su valor no disminuya con el tiempo a causa de la inflación.
Ejemplo:
Metas | Cuánto cuesta | Tiempo para llegar | Ahorro mensual |
Seguro de gastos médicos mayores | $40,000 | 6 meses | $6,667 |
Mi primer departamento | $800,000 | 30 meses (2.5 años) | $26,667 |
Muchos piensan que hacer un presupuesto es registrar a detalle sus ingresos y gastos pero no, hacer un presupuesto es tener un plan para tu dinero. Empieza con una de estas opciones o todas estas opciones, el objetivo es formar el hábito de cuestionar ¿qué quiero hacer con mi dinero?
Si solo registras, por más que entres a mucho detalle, solo puedes ver decisiones que ya tomaste. La intención de registrar gastos es conocerte, que puedas analizar tus hábitos de gasto.
Cuando empieces los registros, pregúntate lo siguiente:
Hay muchas maneras de hacer un plan, elige una para que empieces. Si te animas a registrar tus flujos ve este artículo. Lo importante es dejar tu avance por escrito, así sentirás la gratificación de ir cumpliendo tus metas y será más fácil continuar.